Mi abuela y yo


quien tiene una abuela tiene un tesoro por estherimenta

Hace tiempo os hable aquĆ­ de mi abuelo Juan y de mis orĆ­genes marineros pero tambiĆ©n tengo una parte de campo y olivar llena de tardes al sol mientras se dormĆ­a la siesta, de maƱanas que empezaban escuchando a los porretas en la radio con un vaso de eko y yendo a por tejeringos y continuaban en el lava'ero de San Antonio, de compras en los baratos, baƱƔndome en una palangana en el patio de atrĆ”s, cocinando porra frĆ­a o gazpacho, viendo los ricos tambiĆ©n lloran o el circo de los payasos, meriendas de magdalenas caseras y galletas de canela con azĆŗcar y de chocolate con pan y de chocolate que no era chocolate.
Si era invierno hacƭamos roscos de pichi en la tahona y si era verano habƭa noches de ajoblanco y charla de vecinas tomando el fresco y luego, a la hora de dormir, cosquillitas y el loco de la colina, todo eso y mƔs es mi abuela Marƭa y forma parte de mƭ y de lo que soy.

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